Desde el pasado domingo 11 de febrero y hasta hoy se ha celebrado en Costa Rica la carrera por etapas The Coastal Challenge. Era la primera vez que competía en esta dura prueba de seis etapas y que me han llevado a correr más de 230 kilómetros y 10.000 metros de desnivel positivo.
Gané la primera de las etapas y ya en la primera jornada sufrí la dureza de correr con altas temperaturas y humedad. A esto se sumó no poder descansar lo suficiente. Tuve bastantes calambres los primeros días.
En las siguientes jornadas me costó estar en las primeras posiciones, perdiendo por ello tiempo y viéndome incapaz de luchar por la victoria. Pasado el ecuador, conseguí recuperarme y empezar una buena cuarta etapa, liderando en los primeros kilómetros. Sin embargo, todo se fue al traste al errar en un cruce, que me llevó a hacer seis kilómetros más y con ello perdí todas las posibilidades de luchar por la primera posición. Así en la quinta y sexta etapa, he mantenido la dureza y he podido defender la tercera posición del podio.
Finalmente he completado las seis etapas en un tiempo de 27:38:18. La victoria ha sido para el americano Cody Lind y la segunda posición para el canadiense Jean-François Cauchon. Ambos han estado intratables.
Estoy contento por cómo he sabido remontar y darle la vuelta a todo lo que me ha ido pasando día tras día. Ha sido toda una aventura, nunca había sufrido tanto en carrera, con calambres y deshidratación. Además se ha sumado no haber podido descansar bien por las noches por el calor que hacía. Era mi primera vez en The Coastal Challenge y está claro que si uno se plantea participar aquí es necesaria una buena aclimatación previa a estas altas temperaturas y a la humedad.
Cada día ha sido un reto entre ríos, playas y selva. El paisaje es espectacular, tanto como su dureza. Pero desde luego que es una carrera que recomiendo hacer una vez en la vida.
Ahora toca descansar y recuperarse bien que en abril se viene una grande, las 100 millas de Patagonia Run.